Exclusiva de Fondo,Entrevista con Jorge Armando Flores Velasco, un hombre nacido para servirPor Carlos Driotez   Periodista

………………

Nuestro país tendrá el próximo año las elecciones legislativas y municipales, los partidos políticos tradicionales ya están trabajando en el montaje de la campaña proselitista que ofrecerán a los salvadoreños con el afán de convencerlos y lograr su voto; sin embargo, pocos abordan los problemas nacionales de manera responsable y objetiva.

Para conocer una visión diferente que permita la construcción de un nuevo país, entrevistamos al teniente Jorge Armando Flores Velasco quien aspira a ocupar una silla en el curul bajo la bandera del Partido Salvadoreño Progresista, PSP.

Pregunta. ¿Qué recuerdo tiene usted de su niñez y como fue la formación que le dieron sus padres?

Respuesta. En la política hay una serie de situaciones que en nuestro país están sucediendo, vamos a hacer un poco de historia con mi niñez. Hace unos 20 o 25 años atrás, El Salvador era tranquilo, la gente, los jóvenes y menores podían salir a la calle y regresaban seguros y tranquilos, habían espacios de esparcimiento como parques donde los jóvenes hacían deporte y estudiaban y hacían sus tarea ex aula, algo que ahora no lo podemos hacer. Yo recuerdo que en mi niñez me gustaba el fútbol. Yo iba al campo Marte, ahora parque Infantil, ahí junto a otros amigos hacíamos equipos y nos poníamos a jugar, con un diversión sana en los juegos mecánicos y todo era tranquilo. También las familias se reunían, con sus hijos y adultos mayores, esa era una infancia muy bonita.

Cuando pasé a mi adolescencia me enrolé en el ejército. Mis padres pensaron que ahí me podían formar con una disciplinada diferente donde me fomentaran otros valores. Al salir del ejército con el grado de teniente efectivo pasé a la Escuela de Policía Nacional  como alumno, luego me gradué como agente de la PN. Posteriormente ejercí la seguridad pública, estuve en las unidades de patrullaje, estuve en tránsito y luego en el área de investigaciones, conozco a profundidad todo lo que es la seguridad pública. Después de los Acuerdos de Paz pasé a formar parte de la Policía Nacional Civil, PNC. Entré a la Academia Nacional de Seguridad Pública pasé un año estudiando y salí con el grado de subinspector. En la PNC me especialicé en las áreas de investigación, policía comunitaria. Luego salimos al extranjero, he estado en España y  Estados Unidos cursando estudios especiales en seguridad.

P. ¿Qué recuerda de su niñez, de los momentos agradables de esa época que no sufría el problema serio que enfrentamos ahora con la delincuencia y las pandillas?

R. Eran momentos agradables ir a las escuelas públicas donde la primera vez me llevó mi mamá para que conociera y luego iba solo, no había problemas de inseguridad de grupos delictivos como las pandillas. La delincuencia común que había en aquel entonces no tocaba a la niñez ni a la adolescencia, era una vida llena de valores inculcados por nuestros padres y maestros. Era tan bonito que uno salía con sus amiguitos y se iba al parque Infantil o Venustiano Carranza, al Zoológico Nacional, uno podía caminar varias cuadras sin problemas.

Me acuerdo de niño que cuando viajábamos en los buses los hombres les cedían el asiento a las señoras, a las mujeres embarazadas y a los menores de edad, había un respeto para los mayores y eso era bonito en esa época.

P. ¿Cree usted que ahora existe voluntad, fuerza y decisión y podemos los salvadoreños transformar este país y llevarlo a tiempos similares como era antes?

R. Sí se puede trabajar, pero todos los salvadoreños tenemos que cambiar de actitud porque hoy tanto nuestras familias como nuestro país están desintegrados. El papá y la mamá trabajando, el joven con la vuela o un familiar cercano que no ejerce control sobre él, esos  cambios debemos hacerlos para que volvamos a esa época. Yo recuerdo que mi padre trabajaba y  mi madre nos cuidaba, cuando mi padre llegaba de trabajar teníamos un convivio con él y nosotros queríamos ser como nuestro padre, él era un líder, ahora hay que inculcar eso a los jóvenes, hay que  sanear y unir a la familia porque la unión familiar es el progreso de un pueblo, si no tenemos valores vamos la perdición, ahí vamos a encontrar en la calle las drogas, las pandillas, la delincuencia organizada de la cual el joven de hoy está a merced de esos problemas sociales que existen. Estos cambios podemos hacerlos con una buena educación, hay que invertir en la educación y en la familia. Además en el país no tenemos espacios donde practicar el deporte sanamente, hay espacios pero muy reducidos e inseguros, Ahora en los parques hay ventas de drogas e inclusive la prostitución y todo eso tenemos que combatirlo.

P. Los políticos actuales hablan mucho, pero hacen poco y no vemos pasos concretos para rescatar a la juventud y construir un ambiente diferente. ¿Si usted fuera diputado por el Partido Salvadoreño Progresista como actuaría en función de la juventud y de la niñez?

R. Lo que hay que hacer es invertir en una educación integral, tenemos que promover el deporte, pero no solo como esparcimiento sino hacer del deporte algo competitivo, creando las escuelas de fútbol lo cual solo para unos existe. Tenemos que invertir en capacitarlos, si no tenemos los espacios para una educación superior podemos tecnificarlos, porque la mano de obra en El Salvador está escasa. Veamos los “call center” que están pidiendo jóvenes que puedan hablar inglés, que sepan operar una computadora, pero no tenemos y andamos rebuscándonos con los jóvenes. Tenemos que tecnificarlos, abrir espacios en las universidades. La Universidad de El Salvador, la podemos trasladar a otros departamentos para ayudar a los jóvenes que no puedan trasladarse hasta San Salvador por falte de recursos económicos, además se  exponen a accidentes y asaltos.

P. Sobre este tema de las maras o pandillas, ¿qué cree que ha faltado y qué debería de hacerse para encaminar a los jóvenes a algo diferente. Qué cree usted que se debe hacer?

R. Hay que abrir espacios porque en El Salvador no todos son delincuentes, a los jóvenes hay que integrarlos a programas preventivos, pero además tenemos que abrir esos espacios porque el joven no quiere ser delincuente quiere integrarse, que le pongan atención, que los escuchen, pero solo los escucha la calle. Muchos jóvenes vienen de Estados Unidos donde se organizaron las maras, cuando son deportados llegan al país y vienen a fortalecerse con los jóvenes que nosotros tenemos que no asisten a las escuelas, ni formándose en lo técnico, no hay trabajo y si hay trabajo se paga menos del sueldo mínimo y les exigen más, entones el joven está entre la espada y la pared. Con estos bajos salarios cómo el joven va a obtener la alimentación para su casa. La niñez tiene que estar estudiando o tiene que estar en programas educativos y de esparcimiento. Se pueden hacer las guarderías para que las madres solteras lleven a sus hijos y no esté en las casas cuidados por las abuelas, si nosotros hacemos esos programas recuperamos a la juventud. También podemos poner la parte coercitiva aplicar la ley adecuadamente como debe de ser. En El Salvador las cárceles están saturadas deben existir proyectos para que esas prisiones ya no sean universidades del crimen, pero también hay que trabajar para readaptarlos a la sociedad, que los jóvenes aprendan algo, que no estén en un ocio total sin hacer nada. Muchos pueden estudiar estando presos, sacar su bachillerato, formar técnicos para que cuando salgan se integren a la población, pero no se está haciendo nada.

P. ¿Qué ve usted que hace falta en la educación escolar, qué propuestas concretas haría usted para una educación integral y no propuestas políticas como hacen muchos?

R. A los jóvenes debemos mantenerlos entretenidos. Por ejemplo si tenemos escuelas de fútbol debe buscarse que se preparen y puedan vivir del fútbol. Aquí la educación está muy cerrada unos pueden entrar a estas escuelas y otros no. Ahora que digan que en El Salvador el analfabetismo no existe no es cierto, entones a los jóvenes hay que darles educación a tiempo completo, porque a medio tiempo tiran los libros se van a hacer otras cosas porque no hay un control de la familia, no hay control de los maestros, no hay control de alguien que los tenga haciendo algo productivo. Actualmente el joven está malgastando su tiempo, aquí no hay lugares donde el joven vaya a hacer sus trabajos ex aula y no lo vayan a asaltar o a convencer para que se integre a las pandillas, debemos buscar que pongan sus energías en algo positivo.

P. En ese sentido, ¿qué llamado le haría usted a los padres y madres actuales para ayudar al país a construir ese nuevo destino y lograr un país diferente?

R. Les haría un llamado para que se unan y sean una familia integral, con valores que se logran asistiendo a las iglesias, pero si el padre o la madre no le dican tiempo a sus hijos y hacen cosas indebidas el niño va a aprender. Como ejemplos tener un padre alcohólicos, o una madre que ocupa su tiempo en cosas indebidas.  La familia debe integrarse en las cosas positivas, platicar con sus hijos, pero esa comunicación familiar es rara en esta época. Ahora el joven está en la computadora viendo cosas indebidas que le dañan su formación mientras el padre está viendo películas o la madre ve novelas y se desatienden de sus hijos, de su formación y de su conducta. Los jóvenes deben aprovechar toda esa energía que tienen y trabajar su cerebro en cosas positivas, hacer ejercicio físico.

P. Usted como ciudadano salvadoreño que se preocupa por la violencia, delincuencia y otras cosas negativas, ¿está buscando hacer algo para construir un partido diferente?

R. Yo estoy afiliado al Partido Salvadoreño Progresista, PSP, que es un partido abierto donde todo salvadoreño, de cualquier corriente ideológica, tiene la oportunidad de afiliarse y participar en política porque nosotros venimos a servirle al pueblo y no a servirnos del pueblo.

El PSP fue formado por militares de todos los rangos desde el patrullero hasta el último general para sacar a nuestro país adelante. Nosotros estamos formando nuestra estructura en los 14 departamentos del país. En La Libertad yo soy el secretario departamental del partido y también me estoy postulando para diputado de la Asamblea Legislativa por La Libertad.

Como fuerza armada mucha gente  tiene un concepto equivocado porque se remonta a años anteriores pero sabemos que la fuerza armada después de la firma de los Acuerdos de Paz cambió totalmente, ahora la FAES tiene una visión diferente respetuosa de las leyes y normativas internacionales sobre derechos humanos.

P. ¿Es ésta la visión que usted impulsaría dentro del partido?

R. Si, nosotros los militares somos disciplinados, también nos estamos innovando por lo tanto no podemos estar viviendo en el pasado, vamos a un futuro mejor donde le apostamos a nuestros jóvenes y dignificar al adulto mayor, porque el adulto mayor es aquella experiencia que nos puede guiar, pero desgraciadamente en el país un adulto mayor de los 40 años ya no es productivo según la empresa privada. El futuro del país es algo que nosotros como PSP vamos a tener que hacer porque nadie nos viene a hacer nuestro futuro sino que nosotros lo hacemos y lo vamos a hacer con obras buenas, con cambios radicales como apoyar a los jóvenes y a las mujeres, porque tenemos que trabajar para que las mujeres ingresen en la política, si el Tribunal Supremo Electoral nos impone un 30% nosotros aspiramos a más, a lograr un 60%. Nosotros andamos cumpliendo con la mujer trabajadora, activa, abnegada que en muchos casos son madre y padre en un hogar.

P. ¿Cómo piensa el PSP trabajar para lograr  ese acercamiento con los jóvenes y lograr lo que hicieron nuestros padres con nosotros y comenzar a construir una nueva juventud?

R. A la población hay que hablarle con la verdad, los jóvenes si ven que alguien los está engañando ellos dan la espalda porque están aburridos de los políticos que en este momento existen, que todo es mentira y solo se acuerdan de ellos cuando hay elecciones, en cambio el PSP va a tener ese acercamiento con las comunidades, con los jóvenes, con los adultos mayores. Nosotros tenemos planes ya específicos, ya trazados para llegar a esta población, porque cuando nosotros abordamos a los jóvenes nos damos cuenta que ellos quieren oportunidades, que el político no vaya a mentirle en las campañas y después ya no se acuerde de ellos. Nosotros vamos a hace nuestra política de acercamiento con las comunidades que necesitan un montón de cosas, tienen muchas necesidades que nosotros como partido desde la asamblea les vamos a ir dando seguimiento, es una promesa que tenemos con las comunidades, vamos a tenerlas puertas abiertas. Nosotros si llegamos a la asamblea vamos a tener espacios para estar con nuestra gente y estar ayudándoles, platicar con ellos, escucharlos, estar cerca de ellos, esa es la promesa que tenemos con nuestro pueblo.

P. ¿Debe entender el pueblo entonces que es necesario tener nuevos líderes políticos con una visión de futuro, de cambio, pero cómo hacer para lograrlo y que la gente se acerque y entienda lo que ustedes están promoviendo?

R. Nosotros ya estamos haciendo ese esfuerzo. En las comunidades donde  llegamos se ve esa alegría, porque antes no ha llegado ningún político, solo lo oyen de lejos y cundo llegan es solo para pedir el voto e invitarlos a concentraciones y solo ahí ven al político. Nosotros no le vamos a mentir a la gente como han hecho los políticos en épocas anteriores cuando vienen las votaciones, nosotros anotamos las necesidades y les proponemos qué es lo que hay que hacer. Como hacemos con las comunidades ilegales que necesitan una asesoría jurídica que nadie se las ofrece. No les conviene decirles la verdad porque a esas comunidades las tienen como un vivero de votos y no para que esa comunidad se desarrolle y logre tener la legalidad de su pequeña propiedad que es lo que todo salvadoreño aspira tener su casita, pero los políticos tradicionales solo les ofrecen pero nunca les dan sus escrituras de propiedad. Nosotros tenemos un equipo de abogados que trabajan escuchando los problemas de la gente y buscamos como ayudarles, así nosotros trabajamos por nuestra población. Un joven necesita trabajar, tener espacios para una recreación sana que no hay. Los jóvenes buenos tienen que estar encerrados. Que podemos hacer, debemos ir a esos lugares que están posesionados por la delincuencia e irlos a recuperar. Al joven malo, al equivocado, tenemos que llevarlo a programas que le den la mano y decirles que están en un lugar equivocado, esas son las propuestas que nosotros llevamos a nuestro pueblo, no mentiras porque el pueblo está cansado de mentiras. La población necesita seguridad y trabajo.

Aquí hay lugares donde a partir de las seis de la tarde los delincuentes ponen toque de queda, entonces a dónde vamos, si el único que puede poner toque de queda y en excepciones es el Estado, a dónde están los derechos de las personas,  en eso es en lo que vamos a trabajar, asesorando a nuestra gente, para que se sientan motivados por la política diferente que andamos haciendo en las comunidades.

P. ¿Qué aceptación han tenido hasta el momento el PSP. Qué ha visto usted en las caras de estas personas cuando escuchan estos mensajes?

R. Ellos ven una esperanza y aspiran una solución a futuro, porque existe una desesperación en la población cuando pasan cosas que les afectan como en la actualidad que no hay frijoles y el que está en el mercado tiene altos precios con aumentos de hasta el 100%. La población ve en nosotros una esperanza, ve un nuevo amanecer y dice ya era tiempo, y se pregunta por qué no lo hicieron antes. Ya es tiempo que cambie nuestro país. Ya es tiempo que surja un partido como el PSP, porque la gente considera que sus derechos constitucionales están pisoteados como la libre circulación, el libre esparcimiento, la alimentación accesible a bajos precios. En este país hay personas que están viviendo con 25 centavos de dólar al día, eso es inseguridad. Para tener progreso en el pueblo tenemos que tener las condiciones básicas como la alimentación y la seguridad.

P. En el marco de todo esto que hemos hablado, ¿qué mensaje le enviaría a los salvadoreños hombres y mujeres para que tenga esperanza en un futuro mejor, cree que el pueblo está decidido a construir juntos con partidos como el PSP un nuevo país?

R. Yo los invitaría a que participen en política, que no seamos un eslabón o un peldaño más, sino que participemos en la política. Hay que tomarnos el poder político, esa es la invitación que les hago, que los jóvenes, hombres y mujeres, deben participar en la política no hay que dejarles esa responsabilidad a otros. Si participamos en política vamos a poder expresarnos, dar sugerencias y opiniones, pero si no participamos otros van a tomar las decisiones y siempre vamos a estar mal. Si  no estamos organizados nadie va a ponernos atención, nadie nos va a dar nuestros derechos, tenemos que estar unidos y para alcanzar el poder político y tenemos que hacerlo por medio de un partido y ese partido es el Partido Salvadoreño Progresista, aquí todos podemos participar porque hay oportunidades de ser alcaldes, diputados, concejales así es que esa es la invitación a nuestro pueblo que participe con nosotros hombro con hombro para sacar a nuestro país adelante y cumplamos aquel sueño de muchos que El Salvador sea mejor.